CAMINO
"Decidida a estudiar letras, mi primer trabajo a los 15 años acompañando a una persona en su final de vida, en un hospital, cambió esa perspectiva: "Este es mi sitio, esto es lo que yo quiero".
Me matriculé en la facultad de medicina y, de distintas formas, durante más de 25 años, me he dedicado a acompañar a las personas en su camino por la vida.
Mi experiencia personal, mi formación académica, y valores como la compasión, el respeto y la consideración por los demás
me ayudan a ayudar a los demás en este viaje vital que, a veces, se hace tan difícil transitar sólo.
Con el convencimiento de que la vida es más bonita con conciencia, animo a mis clientes a disfrutar de lo bueno y de lo menos bueno, para que no se nos escape ni un trocito de vida, y para no dar espacio al arrepentimiento de no haberla vivido como se merece".
edUCACIÓN
Licenciada en Medicina y Cirugía, Universitat Autònoma de Barcelona, 1991
Especialista en Estomatología, Université Paul Sabatier, Toulouse, France, 1993
Posgrado en Odontopediatría, Hospital Sant Joan de Déu, Esplugues, Barcelona, 1995
Máster en Nutrición especializado en Sobrepeso y Obesidad, FUNIBER, 2012
Actualmente cursando Doctorado en Salud Pública.
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Coach Co-Activo, certificada por ICF, 2013
Practitioner en PNL, 2013
Graduada en Liderazgo Co-Activo, CTI, 2014
Formación en Sensibilización para la Igualdad.
Formación Continua en programas de Voluntariado. Atención en el duelo.
SOLIDARIDAD
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Voluntaria en acompañamiento a personas en final de vida y a sus familiares. Proyecto Llavors de Vida, Fundació Hospital de Mataró, Obra Social La Caixa. Dedico 2 horas a la semana, cuando estoy activada.
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Miembro activo de la Asociación Mans Amigues, Supervivents del Suïcidi, Mataró.
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Cofundadora de Coaches On Road, proyecto de ayuda para la mejora de la autoestima de personas en situación de vulnerabilidad. Taller "La Màgia d´Estimar-se", de 3 horas de duración.
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Voluntaria formadora para voluntarios en Fundación Sant Jaume i Santa Magdalena, Mataró. Formación en autocuidado y primeros auxilios.
"Tardé 13 años en atreverme a hacer un voluntariado de acompañamiento en final de vida. Pensé que no sería capaz, que mi mochila estaba demasiado cargada.
Un día me di cuenta de que estaba victimizando, y que no tenía derecho a dejar de ayudar poniendo de excusa mis experiencias personales. Si tenía las capacidades para ayudar, que las tengo, no podía dejar de ofrecérselas a quien las necesitara.
Me armé de valor pensando que lo necesitaría. Y no fue así.
Hacer voluntariado es lo mejor que hago en mi día a día, ahora que mis hijos ya son mayores. Recibo muchísimo más de lo que doy".
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"Dedico aproximadamente unas 6 horas a la semana a mis proyectos de voluntariado. Muchas veces más, pocas veces menos".